Amor se escribe sin "H"

¡Hola! Tal y como prometimos aquí venimos a dar una reseña/opinión personal/crítica/a hablar sobre...

Amor se escribe sin hache
Del gran Enrique Jardiel Poncela
(a sintonía de I'm a Terrible person, ¡canción excelente que me pone de buen humor!)


En fin comencemos por esos detalles básicos que debemos brindar en esta reseña:

Nombre de la novela: Amor se escribe sin hache (no es obvio, ¡lo pone en la portada!)
Autor: Enrique Jardiel Poncela, un hombre con mucho talento de por hayá el siglo XX (el pasado)
Edición de: Roberto Pérez (ignoramos quién será este señor)
Editorial: CATEDRA
Nº de páginas: Bastantes para entretenerte un buen rato.
Color de la portada: Negro

Argumento: La novela narra las aventuras de Elías Perez Seltz (Zambombo), un tipo cualquiera de Madrid y doña Lady Brums (Sylvia), una mujer que se ha casado tres veces (actualmente con Arencibia), hermosa, con una gran fortuna y con gustos muy raros y sofisticados a todo en lo que se refiere al amor. Excedida con los amantes (dos nuevos por semana), se extraña de sobremanera cuando su nuevo marido Arencibia, al enterarse de la existencia de éstos (de los amantes), en vez de mandarlos a ahorcar los manda ejecutar; ejecutar una firma a un contrato que los pondrá en antecedentes de que Arencibia sabe sobre ellos (y donde les manda un cordial saludo). ¿Qué se pensaban? xD
Bueno, la cosa es que Lady Brums, sin saber qué hacer, busca en la guía telefónica un nombre cualquiera y da con el de Elías Perez Seltz, entonces va a su casa y le explica su historia. Él queda cautivado por Sylvia, y se dispone a retar a un duelo a muerte a Arencibia por su amor (en el cual cómicamente sólo murieron un par de sombreros). En esta situación, Arencibia se ve obligado a entregar a su esposa a Zambombo, pero antes de partir, le aconseja que tenga cuidado, pues le hará sufrir.
Así pues Sylvia y Zambombo se sumergen en su viaje a la burbuja del amor (comenzando por su estancia en París, continuando en otras ciudades como Rottedam, Londres, y asegurando Jardiel Poncela al lector, que en todos esos lugares se ama igual). Pero como le advirtió Arencibia, las mujeres no son como parecen...

Opinión personal: ¡Demonios! Qué decir, que me ha encantado, el estilo de Jardiel es de lo más gracioso (creo que desde Gafin School no tuve una experiencia igual) . Además, es que este autor no sé cómo lo hace, pero crea una atmósfera con el lector, que es como si le conociese toda la vida. Me parece que lo explicaban con palabras algo técnicas en el resumen de la editorial. Es una especie de...¿interpelación? ¿Era ésa la palabra? En fin, que mantiene el gancho en todo momento, es admirable cómo consigue que una trama con un tema aparentemente serio como es el amor, se vuelva tan graciosa (y es que como él dice el amor se escribe sin hache y por eso no es importante). Incluso consigues meterte en la piel de los personajes y sentirte identificado con ellos, por ejemplo a mí me pasó eso con el protagonista, Zambombo (¡tan inocente!), e incluso con Sylvia. ¿Quién no ha caído alguna vez en la rutina? Puede parecer una señorita totalmente despiadada, incluso cruel e insensible, y realmente, eso es lo que es, una señorita totalmente despiadada, cruel e insensible (y en el fondo le coges cariño y todo, porque ves en ella todo lo que tú no tienes, y como se sabe, los humanos somos así de celosos). Bueno, que me enrollo como las persianas, mi opinión es que todo el mundo debería leer a este señor. Pienso comenzar pronto con Espérame en Siberia, vida mía, y si mi humor no se encuentra tan gris como las nubes que acechan en todo momento con descargar una tormenta sobre mi cabeza, haré una nueva reseña. Mientras tanto, diviértanse ustedes!

Nota Final: 10, ¡este libro no se merece menos!